Estufas de pellets: ¿Cómo medir la calidad del pellet?
- 28 Nov 2019

En los últimos años, las estufas de pellets y la
biomasa han ido ganando un gran peso en el campo de la calefacción. Se trata de
una alternativa “verde”, lo que implica una apuesta por la ecología y el
medioambiente, dejando de un lado las opciones que trabajan gracias al uso de
combustibles fósiles.
Esta clase de estufas, como su nombre indica, se basan en la
combustión de pellets, comprimidos sólidos fabricados a partir de virutas,
serrines y astillas que proceden de los restos de poda. Como es de esperar,
habrá distintas calidades de pellets. ¿Cómo diferenciarlas y medirlas? Desde
Instala Tu Caldera vamos a aprovechar estas líneas para resolver cualquier duda
que puedas tener.
Los pellets, elaborados a partir de restos forestales o de
la industria maderera, no necesitan ni pegamento ni ninguna sustancia que no
sea la propia madera. En su fabricación, primero se someten a un proceso de
secado y posterior prensado. De esta forma, se eliminan impurezas y se resta su
propio nivel de humedad.
La elección de entre todas las estufas de pellets es
tan importante como elegir el propio pellet. En nuestra experiencia en este campo,
hemos podido comprobar que de entre todos los tipos de madera existentes, los
pellets de haya y de abeto son los más recomendados. Hay que precisar que un
pellet elaborado con materiales de mala calidad creará una incorrecta
combustión posteriormente.
¿Esto implica que el resto de pellets fabricados a partir de
otras maderas no sirven? Para nada. Hay muchísimas clases buenas, pero estas
opciones se han comportado de la mejor forma a la hora de producir calor y
aumentar el confort y el rendimiento de la instalación.
Además, un buen pellet ha de tener unas medidas que ronden
entre los 6 y los 8 milímetros. Aquel que exceda o que no llegue a este tamaño
ofrecerá un rendimiento inferior. Sin olvidar que su estructura ha de ser
compacta. Cuanto menos aire contenga en su interior, mejor. Si aprietas uno y
se hiciera polvo en tu mano, será un indicador claro de baja calidad.
Para terminar, como especialistas en estufas de pellets,
no podíamos olvidarnos de su color y brillantez. La tonalidad del pellet ha de ser
uniforme. Si dispusiera de colores extraños, estaremos ante una señal de
presencia de materiales extraños. Además, un pellet de la más alta calidad ha
de ser brillante, liso, de longitud uniforma y sin polvo.